La idea de participar en este campeonato surgió en uno de los viajes que tanto Paco como Felipe emprenden a Tomelloso dos veces por semana para llevar a cabo su rehabilitación, donde practicaban tenis de mesa una vez por semana. A raíz de esto, Felipe se puso en contacto con José María Bobo, presidente del Club de Tenis de Mesa de Alcázar de San Juan, quien no dudó en poner a disposición de estos dos deportistas las instalaciones del club en el Pabellón Vicente Paniagua. Gracias a este gesto, ambos pueden practicar con más regularidad este deporte que, tal y como explica Morata, tiene una gran eficacia terapéutica, ya que "no exige mucho esfuerzo, pero sí te centra la atención, los reflejos y el equilibrio".
Durante la visita, Morata y Roncero han aprovechado para expresar su preocupación por el bajo número de ciudadanos y ciudadanas en Alcázar de San Juan que reconocen abiertamente sufrir la enfermedad de parkinson, que constituye la segunda dolencia neurodegenerativa más frecuente después del alzhéimer: "Lo primero que deben hacer es ser conscientes de la enfermedad que tienen, y no pasa nada porque los demás ciudadanos lo sepan. Desde ahí, ponerse a trabajar en esta o cualquier otra actividad deportiva para trabajar en esas deficiencias para que las puedan no superar, pero sí mitigar y necesitar menos ayuda para su vida diaria", concluían ambos.
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