En la quinta jornada de liga y muy a pesar de un pésimo arbitraje de Monasor Blesa, el Gimnástico sigue puntuando y se coloca ya con 15 puntos como líder en solitario en este segundo grupo de la Primera Preferente.
Los de Ángel García se las vieron y se las desearon ante un Illescas B que salió a por todas, y que a pesar de llegar a Alcázar en medio de la tabla y con 5 puntos menos que los rojillos, mostró una buena imagen aunque a veces en exceso marrullera. Los locales sin embargo no lograron tirar a puerta más que una vez en los primeros 45 minutos, corría el minuto 34 cuando Juanvi lograba adelantar al Gimnástico. Ese uno a cero iba a ser el definitivo en el marcador, aunque en la segunda parte el Gimnástico tuvo muchas más ocasiones y si que lanzo a puerta en varias veces, pero la implacable defensa del Illescas, la mala suerte y una pésima actuación del árbitro y sus asistentes, impideron que el conjunto alcazareño pudiese sumar más goles, y de hecho, tras la expulsión de Carlos Olivares en la segunda parte (min. 64), el público local acabó muy enfadado e incluso pidiendo la hora.
Lo mejor, los tres puntos que sumaba el equipo alcazareño que lo mantienen en lo más alto de la tabla, lo peor sin duda el fuerte golpe sufrido por Benítez tras una durísima entrada en la primera parte y que lo enviaba directo al Hospital Mancha Centro, donde fue atendido con un golpe junto al ojo.
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